lunes, 29 de noviembre de 2010

Lección 10 - ¿Las posadas son biblicas?


Me gustaría cambiarle el titulo a la lección, ya que los católicos si basan las posadas en la Biblia, y lo basan en el evento de cuando los padres del Señor no encontraban, hospedaje en Belen, poco antes de que naciera nuestro Señor. Así que me gustaría el titulo: Las posadas no son del Pueblo de Dios.

Hay que dividir esta lección en dos partes, una que sea de mera información y la otra de formación.

Información: Investigar en varios lugares acerca del origen de las posadas, compaginar la información y exponérselas a los niños, hacerles ver a nuestros niños que de a pesar de esta información y que incluso se la presentemos a los católicos de una forma atenta o amable, es difícil que ellos dejen sus tradiciones. Y aquí esta la clave del tema, que son tradiciones de la gente, por eso no las han dejando, y por eso es necesaria la siguiente parte de la lección.

Formación: El instruir a nuestros niños quienes somos, y que como hijos de Dios esas tradiciones no son nuestras, por lo cual nosotros no las festejamos, por el contrario la Palabra de Dios nos dice que las alejemos de nosotros, e incluso hay consecuencias si en algún momento queremos ser parte de esas tradiciones o fiestas.

La verdadera estrategia para evitar que nuestros niños participen de todas esas fiestas, es hacerles saber quienes somos y cuales son nuestras formas de vida y conducta, y que todo lo que haga el mundo no nos corresponde.

Lección 10 - El mensaje de Amos


En esta lección vemos dos puntos de vista, tanto el del predicador como el del congregante, y creo que ambos aspectos que se ven en la lección aplican a ambas partes. Basados en el mensaje y vida del profeta Amos; un profeta que fue tomado de en medio de las ovejas, un origen muy humilde, fue parte del pueblo y luego parte de los profetas, de esos profetas que dieron (no muy buenas) profecías sobre Israel.
El objetivo nos habla de dos aspectos, el primero: La importancia de aceptar con mansedumbre la enseñanza de los sabios, tengan el origen que tengan y segundo: la murmuración y calumnia son dos muy malos hábitos que hay que desarraigar de nuestra forma de vida y de nuestras congregaciones.
La primera parte del comentario esta relacionada con aquellos que tenemos el honor de estar al frente de la congregación, ya sea en la predicación o guiaza del culto de la congregación o en el pastoreo de las almas este trabajo es una encomienda que voluntariamente hemos asumido, por lo cual es un trabajo que hacemos con todo gusto, siempre teniendo en cuenta que es para el Señor; decimos esto porque siempre desde donde sea, habrá critica, alguna que nos guste y otra que no, alguna que pretenda ayudarnos a mejorar y otra que se haga mal intencionada, si nosotros no tomamos con la justa medida las criticas, perderemos el objetivo de la predicación o guiaza, que es la edificación mutua de nuestro espíritu.
En la ultima parte del comentario se ve un poco, un aspecto que como congregación suele ocurrir y es la de no aceptar con humildad, el mensaje de Dios por medio del predicador; siempre que el predicador lo haga sujeto a la Palabra de Dios, no hay ningún problema, en su mensaje, pero suele pasar que la congregación se resiste a llevar a cabo ciertos cambios en su vida, lo cual lleva a hablar, murmurar e incluso, como dice la lección, se llega hasta la calumnia, aspectos que no son nada buenos en la congregación.
En las preguntas de la lección se analizan en conjunto los aspectos que son prejudiciales, a los dirigentes y a los congregantes, aprendamos a aceptar lo que nos corresponda a cada uno, con humildad, con el único fin de llegar a la perfección.
Una lección muy clara y acertada en cuanto a los aspectos que se quieren analizar.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Lección 8 - Santidad


Y bueno seguimos con los adultos hablando de la santidad y también con los niños, y precisamente el texto para memorizar de los niños es el de Hebreos12.14, sin santidad no podemos ver a Dios, es decir: Sin santidad no obtendremos la vida eterna, es imprescindible que como instructores entendamos a la perfección todo lo referente a la santidad, aplicarlo en nuestra vida y así tener la capacidad para poder explicarlo y más a los niños, los cuales son santos desde que nacen, ya que nosotros somos santos, es por eso nuestros niños, no participan de todas las festividades que tiene el mundo católico - protestante, no son nuestras nide nuestros hijos.(para saber un poco más de la santidad lean la entrada anterior).
Quiero felicitar a quien redacto el comentario de la lección, esta perfecto, así es como se le enseña a los niños, y así es como debería enseñárseles a los mayores; no lo que debemos hacer, sino lo que hacemos como iglesia de Dios, como hijos de Dios, como seres a quienes el Señor a redimido.
Así somos, tenemos la bendición de haber sido predestinados por Dios para recibir de su salvación y su santidad, hemos puesto oídos atentos y nuestra diligencia para hacer nuestras tales bendiciones, y vivir en el camino de Dios; nuestros hijos por herencia también están en este camino, así que es necesario instruirlos de cómo somos, actuamos y porque, y esta lección es muy buena para ello.
Y como siempre la recomendación, una vez que Dios nos ha limpiado, es conservar esa santidad alejándonos de lo que no nos conviene.

Lección 8 - Un recordatorio levitico


De acuerdo al objetivo de la lección, la santidad (adquirida por Dios) en nuestra vida, no sólo beneficia nuestro espíritu, sino también aquellas personas que nos miran, y que incluso al ver nuestra conducta sepan que nuestra vida es diferente y de menos angustia en medio de este mundo.
En esta lección ya se ve un enfoque más acertado de lo que es la iglesia de Dios y no de lo que debe de ser; es decir: Cada uno de nosotros, quienes formamos la iglesia, Dios nos ha santificado por medio de su Hijo Ef 5.25-6, nuestro Señor; la santificación no es algo que logramos por nuestros propias fuerzas o meritos; la santidad es un don de Dios, pero esta en nuestras manos el conservarla He 2.1; 1Co 10.12;1Pe 1.15; esta en nuestra competencia el conservar esa santidad de la cual hemos sido revestidos, el ejercicio de la fe nos ayudara a conservar y llevar nuestra vida de manera santa, por eso el objetivo habla de que nuestra vida también es una forma de anunciar el evangelio, no sólo de palabra sino principalmente de hecho. Es por eso que el mensaje de Levítico es importante en nuestra vida a diario.

Si nos damos cuenta las preguntas están muy bien estructuradas, porque nos llevan de la mano paso por paso, para entender de forma optima lo que es la santidad, quien la otorga, como conseguirla, como conservarla en nuestra vida, y por ultimo lo importante que es delante de Dios el ser santos en toda nuestra manera de vivir.

Me atrevo a invitar a los expositores de la lección y a quienes participan a que analicen muy bien esta lección ya que en ella nos va la vida, y no hablo de esta vida material sino la vida eterna, porque es muy claro el versículo de He 12.14, seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie vera a Dios, como verán es imprescindible que como predicadores otorguemos, de forma clara y eficiente, las herramientas que la congregación necesita, porque de lo que de lo que digamos y de cómo lo digamos depende que los hermanos entiendan, reflexionen y busquen la santidad de nuestro Dios y Dios se las otorgara 2Pe 1.3-4

lunes, 8 de noviembre de 2010

Lección 7 - Buenos hábitos


Me gusta mucho este tipo de temas para los niños, antes que hablar de los costumbres de la gente (aspecto informativo importante) tenemos que decirles a los niños como somos en la iglesia de Dios.
El aspecto formativo de nuestros pequeños es de suma importancia, por eso hablar de lo que Dios nos da para nuestra conducta y como lograr esa conducta es vital, así los niños aprenderán en esta lección acerca de los buenos hábitos.
Me gusta mucho el texto que han elegido para esta lección, nuestros actos (como son de Dios) son luz, de forma que alumbran en todo lugar y momento, mostrando a los simples lo que somos, hijos de Dios.
La lectura de la lección, nos marca un evento donde los apóstoles no pueden realizar un acto de salud en una persona, Jesucristo les indica que esa operación se realiza únicamente si uno tiene por hábito el ayuno y la oración. Para la promoción de estos buenos hábitos, se me hace mejor usar el capitulo 6 de mateo desde el versículo 5 al 17.
El objetivo es básico en esta lección, dice el apóstol en Fi 4.8, que nuestra mente esta en lo bueno, lo grato, lo que es digno de alabanza, si nuestra mente esta en eso, entonces nuestra relación con Dios es grata.
Es importante que nuestra mentalidad sea saneada por Jesucristo Ef 4.23, ya que de nuestros pensamientos depende nuestra conducta, como lo dice el primer párrafo de la lección, y nuestra mentalidad depende mucho de lo que nuestros padres nos den como ejemplo, así si en casa hay buenos hábitos, como niños es lo que aprendemos. Si nuestros padres han sido renovados por el poder de Dios, entonces en nosotros como niños, se reflejara esa salud y limpieza mental, y entonces esa limpieza mental se refleja en nuestra conducta.
En el párrafo tres vemos una expresión que ya he cambiado y explicado en otras ocasiones, como hijos de Dios no debemos dar frutos, sino que damos frutos, porque lo natural que sucede, si tenemos el espíritu de Dios, es que los frutos se manifiesten. No es un deber sino algo natural y es muy claro el párrafo al decir que nuestra conducta es por amor a Dios.
Lo mismo pasa con el párrafo cuatro, cuando entendemos el evangelio actuamos sin malicia, no es que tenemos que actuar. Ya el Señor nos ha limpiado el corazón por lo cual actuamos así, limpios. Y como hijos de Dios, mantenemos esa integridad con el apoyo de Dios y nuestra disposición de seguir en el camino de Dios.
La pregunta uno nos aclara mucho acerca de quien aprendemos los buenos hábitos; de nuestros padres y principalmente de nuestro Padre celestial.
La pregunta dos la podemos manejar desde el punto de vista de alguien que a pesar de estar en la iglesia de Dios no ha sido convertida por nuestro Dios. Por eso actúa de esa forma tan ambivalente.
La pregunta cinco, volvemos sobre el tema de que no debemos proceder, sino que procedemos así porque el Señor nos ha limpiado nuestro corazón y nuestra conciencia.
Esta es una gran lección para los niños y para los adultos, buscar a Dios para la limpieza de nuestros corazones es básico en nuestra vida, así empezaremos actuar con esos buenos hábitos.

Lección 7 - Comprometidos a servir

Jacobo, en una porción, de su carta, nos hace reflexionar acerca de las obras que hacemos, como producto de nuestra fe, y unas de esas formas, las que él llama La Verdadera Religión es el servicio al prójimo, lo cual abarca muchos aspectos y en los que una vez que conocemos el amor de Dios, no fallamos. De alguna u otra forma, a la medida de nuestras posibilidades, asistimos a nuestros hermanos en sus necesidades, y lo hacemos con nuestro amor.
Es lo que analizaremos en esta lección numero 7, utilizando el ejemplo de Ruth la moabita; quien siendo extranjera conoció a una mujer temerosa de Dios (Noemí), y fue ese ejemplo lo que hizo que Ruth se decidiera por servirla, no sólo a ella, sino principalmente al Dios de esa mujer. Ruth renuncia a su antigua nacionalidad, para adoptar las formas, usos, costumbres y religión de su suegra, porque se da cuenta que esa mujer tiene un Dios diferente, al cual servir produce bendiciones, el servir al Dios verdadero, le otorga grandes bendiciones de carácter material y lo principal de carácter espiritual, ya que incluso es nombrada dentro de los ascendientes de nuestro Señor Jesucristo. Sin saberlo Ruth también sirvió al ser que abría de otorgar la salvación al mundo.

En cuanto a lección, se me hace que esta muy bien estructurada y expuesta; sólo quiero hacer un comentario sobre las preguntas uno y dos y claro esto incluye el titulo, es acerca de la palabra compromiso: Es una obligación contraída, lo cual en el ejercicio de la fe no se da, ya que nuestras acciones no son por obligación, sino por convicción, producto de una transformación interior que Dios ha hecho en nosotros; de manera que el actuar a favor de Dios se da de forma natural, esos son los llamados, escrituralmente, frutos del espíritu, y un fruto es algo que se produce de manera natural y no de forma obligada o por compromiso. De forma que las preguntas uno y dos quedarían de la siguiente forma.

La uno: Mencione ¿Qué reconocimiento le damos a nuestro Dios? Y la dos: Como iglesia de Dios ¿Cómo actuamos con nuestro prójimo?

Y el titulo podria ser: El servicio al projimo