lunes, 24 de enero de 2011

Lección 6 - La Presentación de Niños y su Bendición


La presentación de los niños es un acto que tiene dos vertientes: Primero como hijos de Dios le damos gracias por concedernos la bendición de ser padres, y luego es un acto en el cual buscamos la guiaza y las bendiciones de Dios para nuestros hijos y para nosotros como padres.

Definitivamente la capacidad de procrear una vida es una grande bendición de parte del Padre, razón por la cual surge en nosotros el agradecimiento, pero también nace en nosotros la responsabilidad que corresponde a nuestra madurez, por criar y formar, a esos pequeños dentro del mejor de los ambientes, pero sabemos que esta es una labor enorme, de ahí que al presentar a nuestros hijos a Dios, igualmente busquemos de esas bendiciones para que nuestros hijos crezca de la forma mas sana posible en todos los aspectos de su vida, principalmente en el espiritual.

Vemos una bonita instrucción a raíz de un evento dentro de la vida del Señor Jesús: Cierto día unos padres se acercan al Señor con el fin de que pusiese las manos sobre sus hijos y que estos fueran bendecidos, a esta acción los apóstoles les reprenden y les impiden el paso hasta el Señor, pero el Señor les instruye a que no hagan todo lo contrario, había que dejar a los niños acercarse a Él. Podemos entender que los padres de esos niños se fueron muy felices por haber recibido las bendiciones del Señor.

En cuanto a las preguntas sólo me gustaría comentar de la numero dos: la pregunta dice ¿Qué debemos hacer cuando Dios… no es un deber el presentar a nuestros hijos a Dios, es una respuesta de agradecimiento por haber tenido esa bendición; de forma que la pregunta debe estar así ¿Cuál es nuestra respuesta cuando Dios… lo que recibimos de Dios eso le damos.

lunes, 17 de enero de 2011

Lección 4 - La bendición de participar de la Cena del Señor


La Cena del Señor, es uno de los actos más importantes dentro de la vida cristiana: Fue un mandamiento expreso directamente de la boca del Señor, momentos antes de saber que habría de ser sacrificado, por cual establece el rito de la Cena del Señor para conmemorar ese día y para confirmar la unidad que existe entre Él y nosotros, entre nosotros y nuestro Padre.

En eventos previos a la última cena pascual e institución de la Cena del Señor, Cristo, ya les había dicho algo al respecto Jn 6.51-57, el relato nos indicia que los judíos no entendieron porque les decía que su carne y su sangre eran verdadera comida, incluso les resulto algo abominable; no nos dice que cual fue la reacción de los sus apóstoles; lo que si es seguro es que cuando el Señor les mostraba el pan azimo y el jugo de la vid en la copa, y les daba la referencia que esos elementos representaban su carne y su sangre, los apóstoles fueron iluminados y entendieron que al realizar ese acto, cada año, podían seguir en comunión con su Maestro, …el que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él…, palabras del Señor, que son una garantía de que así será hasta que el regrese a la tierra.

El Señor no nos dejaría solos, si bien existe la fe y el Santo Espíritu de Dios, tenemos también esta bendición, el ritual de la Cena de Señor, con el cual año con año, confirmamos nuestra unión con Él y nuestro Padre; comemos al Señor, bebemos al Señor, por lo cual somos parte del Señor y el de nosotros, esto en sí es la grande bendición.

De ahí que se vuelva importante la participación en este ritual, por todos aquellos que hemos hecho el pacto con nuestro Dios (siendo bautizados); por lo cual es importante hacer uso de la reflexión para presentarnos ante la mesa del Señor de una forma digna y grata. Una forma en que nos sintamos bien en nuestra relación que tenemos con Dios; el apóstol Pablo nos invita a ese examen de conciencia en 1Co 11.28, para que una vez hecha esa reflexión participemos de la mesa del Señor, lo cual nos seguirá trayendo consigo grandes bendiciones.

La lección pasada hablamos del bautismo como producto de una profunda reflexión y arrepentimiento y la transformación que Dios opera en nuestro espíritu; como ya tenemos la simiente de Dios 1Jn 3.9, esperamos gozosos cada año para participar de los emblemas representantes del cuerpo y la sangre de Cristo y del lavamiento de pies los unos a los otros, para así confirmar la unión que se ha creado desde el momento que fuimos transformados.

lunes, 10 de enero de 2011

Aviso sobre las lecciones de los niños

He leído las últimas dos lecciones de los niños y me gustan mucho como están hechas, la forma en que les hablan a los niños por esa razón no he tenido comentarios a las lecciones.

Un buen trabajo hasta ahora, felicidades a los que lo han hecho y que Dios les siga dando bendiciones.


Paz a vosotros.


Lección 3 - La bendición del bautismo


Entramos a un tema muy importante para la vida cristiana, incluso podemos decir que es un tema de vida eterna: El bautismo es un evento básico en aquel que ha creído a la Palabra de Dios y desea ser parte de los redimidos a quienes en un futuro; Dios, les dará la vida eterna.

El texto para memorizar nos dice que sin el bautismo luego de arrepentimiento no es posible recibir el espíritu santo, y si no somos guiados por el espíritu santo como podríamos ser hijos de Dios, es por lo cual que el bautizo se vuelve imprescindible si deseamos la promesa de Dios, por eso la lección nos habla de la grande bendición que es el bautizo.

El bautismo es un acto (ritual) en el cual confirmados (públicamente) que Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo ha hecho un cambio sustancial (para bien) en nuestro espíritu. Un vez que hemos hecho este pacto publico con nuestro Padre, ya somos parte de los hijos de Dios. Sólo así tenemos la plena conciencia que lo que recibimos, tanto en lo material como en lo espiritual, son bendiciones que provienen de Dios. Es decir que luego de ser bautizados las bendiciones de Dios se hacen una realidad, constante, en nuestra vida.

Ahora pasemos a las preguntas, y a diferencia de otras ocasiones me gustaría poner mis comentarios con lo números que corresponden a todas las preguntas.

1 En esta pregunta me gustaría leer primero la cita de Juan, ya que son las palabras del Señor las que nos guían al correcto entendimiento de lo que significa el bautismo y de la bendición que obtenemos con ello. El Señor nos habla de un nuevo nacimiento, es decir una transformación hacia una vida diferente, el cual es imprescindible para poder ser parte del reino de Dios. Y notemos que para que se lleve a cabo esta nueva forma de vida (transformación) es necesario tener fe en que Dios lo hace en nuestra vida, por lo cual manifestamos que hemos tenido esa fe a través del bautismo en agua.

2 Noto que esta pregunta no tiene razón de ser ya que es muy claro que Dios envió al mundo a su hijo, para salvar al mundo; sin que distinción de genero, raza, idioma; si aceptamos y creemos que Dios es perdonador, hace la transformación en nosotros. Pero si quiero aclarar el porque de las citas en los hechos: En el pueblo de Israel (hasta la fecha) existe un marcado machismo, algo que hay que erradicar de nuestra comunidad; nuestro Señor Jesucristo, no limita su predicación al genero masculino, por le contrario lo vemos en repetidas ocasiones rodeado e mujeres piados que le seguían, y es debido al machismo que prevalecía en el pueblo judío, en la época en que se escriben los hechos de los apóstoles era sorprendente que se incluyera a las mujeres en esta obra tan maravillosa.

3 La profecía escrita en Isaías 53, se hizo una realidad en Jesús de Nazareth, ese varón es el Mesías, y su muerte por medio de la cruz, sustituía a todos los sacrificio del pueblo judío, que eran para perdón de pecados, así ese sacrificio perfecto y superior beneficia a todo el que cree, haciéndonos hijos de Dios. Esto para el etiope fue une revelación de suma importancia, ya que siendo, él, extranjero no tenia derecho a la remisión de pecados, pero lo que acababa de escuchar le hizo renacer, y solicito inmediatamente realizar el rito que lo convertiría, en todo un hijo de Dios. Notemos algo importante, el etiope no es convertido en el acto del bautismo, él es convertido cuando escucha la palabra de Dios de labios de Felipe, sólo así puede pedir llevar acabo el acto por el cual realiza el pacto con Dios, es decir primero cree y es transformado y luego es bautizado confirmando así esa transformación y fe.

4 Esta pregunta si es muy importante ya que, sólo es a través del Padre y el Hijo, por el poder del Dios, que se pude llevar a cabo el verdadero compromiso de ser hijo de Dios: No hay otro nombre por el cual podamos ser libres del pecado, Hch 4.12.

5 Es muy claro que el bautismo con arrepentimiento es el acto con el cual confirmamos que creemos que Dios nos ha perdonado nuestros pecados.

6 Ahora formamos parte de los seres que Dios va renovando día tras día, hasta llegar a una limpia conciencia o lo que es lo mismo la estatura de nuestro Señor Jesucristo.

Reflexión: El bautismo es una gran bendición, ya que a través de este acto, pasamos a ser formar parte del pueblo santo de Dios. 1Pe 2.9.

miércoles, 5 de enero de 2011

Lección 2 - La importancia de las bendiciones de Dios

Antes que nada quiero pedir una disculpa, ya que por fallas en mi equipo de cómputo interrumpí mis comentarios las dos ultimas semanas, el problema se ha resuelto y ya estoy con ustedes nuevamente, espero no volver a faltar a esta cita semanal.

Entrando en materia, iniciamos un nuevo trimestre, donde hablaremos las siguientes trece lecciones de las bendiciones de Dios. En la primera lección aprendimos lo que son las bendiciones de Dios, en esta segunda hablaremos de la importancia de las bendiciones de Dios, así que sin más, procedo a hacer, como siempre con todo respeto para el autor de las lecciones, mi análisis y comentarios sobre las mismas.

Para la lección pasada, me atreví dar un significante de la palabra bendición que dice de la siguiente manera: “Un beneficio real y practico nuestra vida”, y eso es lo que o veo en el texto para memorizar en esta lección. ¿Qué más enriquecedor que una bendición de Dios? Y ¿Donde podemos hallar más alegría que en una bendición de Dios?

Es importante que no perdamos de vista esto, lo importante de las bendiciones de Dios, que no nos acostumbremos a recibirlas, ya que Dios no esta obligado a otorgarlas, Él nos la da porque nos ama, y ahí esta la clave, sí vivimos siempre el amor de Dios, reconoceremos esas grandes bendiciones que Dios nos da constantemente. Y como hemos sido llenados de esas bendiciones por Dios Sal 40 .3, tenemos, sólo así, la capacidad de corresponder a Dios esas bendiciones por medio de alabanzas, gratitudes y una conducta grata a su presencia. Es por eso que cada día al igual de Jacob, adoptamos la actitud de no dejar pasar las bendiciones, porque ya hemos valorado lo importante que son, y sólo con esa actitud las podemos conseguir.

Lo anterior es la esencia de la lección, aunque claro en las preguntas ya se tocan algunos detalles más, que incluso incluyen a David, el cual nos muestra una actitud y una seguridad propia de un hijo de Dios, en cuanto a saberse depositario, por su conducta, de las bendiciones de Dios, y nos enseña que no hay hombres justos que no tengan esas bendiciones. Lo cual nos hace recapacitar, para que al igual que David nosotros vivamos con seguridad esas bendiciones y no las perdamos por algún descuido nuestro.