viernes, 9 de julio de 2010

Lección 2- Carnes inmundas


Pues hasta esta hora pude hacerme de un cuaderno para niños, así que para no descompletar los temas, haré mis comentarios a la segunda lección de niños.

Aclaro nuevamente, mi intención no es molestar a nadie, y los comentarios los hago con mucho respeto para el hermano que hizo estas lecciones.

Primero: El texto no es adecuado para la lección ya que el contexto del versículo para memorizar, no habla de las carnes inmundas, sino de que Dios no hace acepción de personas. Quedaría mejor el texto, 1ª Pe 1.15 sino, como aquel que os llamo es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir. Es más adecuado porque Pedro se basa en las palabras de Dios cuando pronuncia la ley de la alimentación en Lv 11.

Segundo: Al objetivo me gustaría darle un pequeño giro, y quedaría de la siguiente manera: Entender que Dios nos ha hecho un pueblo santo, por lo cual cuidamos nuestra santidad, incluso en lo que comemos.

Tercero: Comentarios a la introducción.
Primer párrafo: La gente come todo tipo de alimentos, porque son parte de su dieta y de su cultura, incluso de sus ritos, no porque no conozcan a Dios. Y los que han leído la Biblia y comen alimentos inmundos, es porque no han conocido al verdadero Dios, quien nos enseña que es lo que cómenos y que es lo que no comemos.

Segundo párrafo: Como comente antes cada región tiene sus usos y costumbres y dentro de ello esta lo que comen, lo cual para ellos es natural y no hay nada de malo en ello; ellos no saben que están desobedeciendo a Dios porque esta ley, como dice en Levítico sólo es para su pueblo, si no son pueblo, no pueden obedecer. Nosotros somos hijos y obedecemos, aunque en nuestra región se consuma un alimento inmundo nosotros no lo hacemos.

Tercer párrafo: De la boca del apóstol Pedro sale unas palabras muy ciertas, donde él como parte del pueblo de Dios, jamás había comido alimentos inmundos, lo cual es un ejemplo para nosotros, los niños que han nacido en la iglesia, vienen a ser semejantes al apóstol Pedro en ese aspecto.

Cuarto párrafo: Lo que haga la gente, escudándose con la Biblia (forzando versículos) es problema de ellos, nosotros sabemos que no hay nada que un hombre pueda hacer para limpiar algo que Dios ha declarado inmundo, salvo la sangre de Cristo, pero Cristo vino a limpiar a los seres humanos que crean en Él no a los animalitos que Dios declaro inmundos.
Y claro que lo que importa es tener un corazón que Dios haya limpiado, de otra forma Dio son habitara en nosotros, Dios nos limpia, vive en nosotros y nos dejamos llevar por lo que Dios dice que nos mantiene limpios, esto incluye lo que comemos.

Cuarto: Comentarios a las preguntas:
Todas las preguntas están bien planteadas, ya que son la guía para conocer a detalle cuales son los animales que no comemos y los que si comemos, e incluso saber que es una ley para el pueblo de Dios lo cual nos incluye a nosotros como Iglesia de Dios.
Sólo quiero comentar que la visón de Pedro no tiene nada que ver con el tema de las carnes inmundas, salvo que Pedro es ejemplo de que, por ser del pueblo santo, no comió nunca alimentos inmundos, pero el tema principal de la visión de Pedro, tiene que ver con que Dios quiere hacerle saber a Pedro que, todo ser humano tiene derecho a recibir su palabra sea o no judío. Pero como dijo ese es otro tema que igual luego abundaremos, nada que ver con l ley de la alimentación.

Paz vosotros.

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